Benidorm celebra cada año el hallazgo, el 16 de marzo de 1740, de la imagen de su patrona, la Virgen del Sufragio. Esta se hallaba a bordo de una embarcación abandonada que fue remolcada por tres pescadores locales. Cuenta la historia que, aunque se tuvo que prender fuego a la embarcación para prevenir la propagación de la peste, la imagen sobrevivió de manera milagrosa a las llamas.

Como consecuencia de estos hechos, Benidorm reproduce desde 1971 este hallazgo y lo acompaña de un buen número de actividades lúdicas y religiosas que se han convertido en una de las celebraciones más queridas por los vecinos. Además, cuenta con la Declaración de Fiesta de Interés Turístico Autonómico.